DECO: ESCALERAS
Esta semana os traigo un detalle decorativo que puede que asombre a algunos. Se trata de un objeto presente en infinidad de hogares nórdicos y que, poco a poco, va introduciéndose también en nuestra decoración: las escaleras. Escaleras de madera, con un punto rústico y aspecto natural en su mayoría. Algunas utilizadas a modo de revistero, como pequeña estantería o para colgar una guirnalda de luz. Otras al natural, como objetos «deco» en si mismas.
Personalmente me parecen geniales para dar vida a un rincón o a una zona de esas en las que no sabes qué poner. Yo ya estoy buscando la mía, aún que confieso que no me está siendo fácil. Podemos encontrarlas en multitud de tiendas, pero mis favoritas son las naturales y además no excesivamente cortas. Y de momento no la he encontrado, pero sigo buscando. Y a vosotros, ¿qué os parece? ¿Os animáis a ponerlas en casa?
This week I bring you a decorative detail that may astonish some of you. It is an object present in countless Nordic households and, little by little, it is also introduced in our decor: the stairs. Wooden stairs with a rustic and natural look point mostly. Some used as a magazine rack, as small shelf or hang a garland of light. Other natural, as «deco» objects in themselves.
Personally I find them great to give life to a corner or area of those where you do not know what to put. I’m looking for mine, but I confess it is not being easy. We can find in many stores, but my favorites are the natural and also not too short. And so far I have not found it, but I’m looking for it. And you, what do you think? Are you going to put them at home?
Espero que os haya gustado, gracias por leerme!
I hope you like it, thanks for reading!
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Pues la verdad y siempre me gusta lo que publicas, tengo que reconocer que estas escaleras no son lo mío, pero bueno es otra manera de decorar añadiendo un toque rústico a la estancia.
Gracias por comentar 😉
yo estoy deseando encontrarme una de esas escaleras viejas por la calle, son las mejores!
Ojalá la encuentres! Gracias por comentar
Yo os regalo mi escalera rústica. Razón, niños salvajes de tres años.
Ese sí que es un buen motivo para regalarla 😉 Gracias por comentar!